Tunas y Estudiantinas de la Republica Mexicana
  Tuneria para todos
 
Tunería para todos

Ponencia del 3er Congreso Nacional de Tunas y Estudiantinas TERMAC 2011. Cajititlan Tlajomulco, Jalisco, México. Octubre 2011.



Juan Carlos Carrero,
Tuno activo de la  Universidad Autónoma
de Aguascalientes  
años 1992 y 2001

M. C. Carlos Alberto Nando López, Secretario De T.E.R.M.A.C. (Encargado De La Presidencia En Ausencia Del C.P. José Luis Gómez Jiménez), C.P. Fernando Garduño Espinoza, Tesorero De T.E.R.M.A.C., Lic. Julio Cesar Márquez Granados, Director De La Tuna Real De Guadalajara Y Anfitrión Del III Congreso Nacional De Tunas Y Estudiantinas De T.E.R.M.A.C, Con Su Permiso Y agradeciéndoles Por Acompañarnos Aquí, Hoy, Me Permito Dirigirme A La Comunidad De Tunas Y Estudiantinas De Nuestra Asociación y grupos invitados Para Abordar El Tema “Tunería Para Todos”, Bajo El Tenor De Las Siguientes Consideraciones:

·         Tunería en México.- Orígenes, evolución, actualidad (regionalización), corrientes o tipos de grupos.

·         Tunería como hermandad

·         Tunería para todos.

 La Tuna, como todos sabemos, tiene diversas consideraciones en cuanto a sus orígenes, para algunos, sus raíces se encuentran en los antiguos Sopistas y pícaros de antaño hacia el siglo XV o XVI, para otros en los propios continuadores de la tradición Goliarda hacia el siglo XIII: Los estudiantes pobres que se valían de sus habilidades musicales para cubrirse sus estudios y necesidades. De carácter alegre y pícaro, las Tunas nacieron en España, sin embargo es en el siglo XX cuando aparecen diversas agrupaciones de este carácter en toda Europa e Hispanoamérica.


 

 

Es en este contexto que, hacia la segunda mitad del siglo XX, y particularmente en el centro del país, como bien narra Roberto Ibarra en sus “Juglarías del Negro Manteo”, que aparecen las primeras agrupaciones estudiantiles o “Estudiantinas” al interior de la máxima casa de Estudios del país, la U.N.A.M., así como en universidades de varios Estados como Guanajuato, Querétaro, San Luis Potosí y Aguascalientes donde estos grupos de Estudiantes universitarios tienen sus primeras manifestaciones en nuestro país, a partir de estos pioneros habrá de surgir un amplio movimiento que pasó lugares tan representativos como Cuernavaca, Puebla, Oaxaca, Toluca, Guadalajara, Xalapa, Tuxtla Gutiérrez, y de estos lugares ha florecido la semilla, sin temor a equivocarme, hacia todos y cada uno de los rincones de nuestra patria, desde Tijuana, hasta la península.

También es cierto, y vale la pena comentarlo, que el origen de esta hermosa manifestación artística es predominantemente universitario, al ser encabezado por estos estudiantes que usando sus mejores artimañas se solventaban sus más básicas necesidades para mantenerse en la universidad y trovaban por las fondas y mesones para conseguir algo de dinero y un plato de sopa. Por esta razón se les conocía como "sopistas", y se decía que vivían de la sopa boba.



Sin embargo, a través de los años esta hermosa tradición, si bien, en esencia no ha cambiado, si lo ha hecho en formas y costumbres, que no por eso han alterado lo principal como lo es el carácter alegre y picaresco de estas agrupaciones, vale la pena comentar que hoy en día, y haciendo alarde de la máxima de “no hay universidad sin Tuna, ni Tuna sin universidad”, al interior de las casas de estudio de nivel superior sigue siendo una tradición sumamente arraigada y para muestra, baste comentar que hay Tunas Universitarias en instituciones públicas en un sinnúmero de escuelas de educación superior por citas algunas en los Estados de Jalisco, México, Morelos, San Luis Potosí, Oaxaca, Aguascalientes, Sonora, Baja California, Distrito Federal, Puebla, Querétaro, Tamaulipas, Nuevo León, Coahuila, entre otros, y si a ellas le sumamos las existentes en instituciones privadas, pues prácticamente existen Tunas en 28 0 29 de las 32 entidades de nuestro país.

Existen aun corrientes jacobinas dentro de la Tuna que sostienen que cualquier agrupación fuera de la Universidad o bien, que no este formada exclusivamente por universitarios, puede tener cualquier denominación diferente a la de Tuna, como se comenta en “La Tuna, Una Tradición Universitaria, o problema de la Tuna en Chile donde realmente se comenta de manera radical que cualquier agrupación que no este cobijada en el seno de una Universidad no merece siquiera el título o denominación de Tuna, y lo cito textual; “El origen de la Tuna es claro: Nace con la Universidad, y ha representado por mucho tiempo el alma Universitaria.” “Lamentablemente son muchos los grupos en nuestro país y en otras partes del mundo que llevan el nombre de Tuna con poco o sin conocimiento –y con menor razón práctica- de sus normas y costumbres: algunos ni siquiera son Universitarios”. “A estos imitadores les llamamos en lenguaje familiar murgos, o sea, los que integran una murga o agrupación sin tradición tunantesca”. A este respecto menciono palabras de Emilio de la Cruz, que hacen suyas estos Tunos Chilenos sin más reparo en su fondo y cito: “Engolosinados por gozar de nuestro fuero, (…) usando nuestro atavío, usurpan nuestro lugar: Como sucedió en los tiempo de la Universidad de Salamanca, que se acogían so el manto de estudiantes gentes de la más diferente condición que solo buscaban beneficios en tal disfraz, sin embargo, y sin el afán de ahondar en el tema ni de dar la razón a una u otra posición solo comentaré que, en México a diferencia de países como Chile o Perú donde la posición es realmente radical , como en varios otros países de Latinoamérica, la tradición ha dado un vuelco hacia otras vertientes que ha dado por llamárseles agrupaciones o Tunas Independientes cuya formación ha venido a darse con Tunos de varias escuelas, vecinos de una misma parroquia, o incluso alumnos de otro tipo de instituciones de educación no necesariamente superior (primarias, secundarias), agrupaciones de profesionistas, entre otras; aquí debo hacer algunos comentarios que, al paso del tiempo he observado y que creo que, al menos en nuestra visión de Tuna como nación, como movimiento en México tiene sus matices de validez: conceptualmente la Tuna inició como movimiento estrictamente Universitario.
 


Sin embargo, hoy en día, dentro de agrupaciones Universitarias se encuentran conceptos de Tuna tan amplios como “Tuna es una hermandad que busca promover la amistad, solidaridad, confianza y diversión entre los tunos” (Tuna Javeriana de la Pontificia Universidad Javeriana, Bogotá, Colombia); dicho lo anterior cabe la siguiente reflexión: absolutamente todo en esta vida y en este mundo es susceptible de cambio, de evolución, y la Tuna en nuestro país ha evolucionado dándole entrada a gente que si bien, ha tenido la enorme fortuna de pasar por un aula Universitaria, quizá no tuvo la visión de integrarse a su agrupación durante ese tiempo o bien, no existe o existía una Tuna en su casa de estudios, por otro lado, también es cierto que la música como tal, es parte de la formación personal y el crecimiento de cada uno de los individuos en sus valores como ser humano, es por ello, que igualmente valido encuentro que se dé la formación de Estudiantinas al interior de escuelas de educación media, siempre y cuando exista la debida información en cuanto a los orígenes y tradiciones de la Tuna, sus instrumentos, tradiciones, indumentaria, etcétera, y aunado a ello, se sigan dicha tradición al pie de la letra; otro punto álgido pero vigente son las mujeres en la Tuna, quizá aquí cabría toda una disertación al respecto sin embargo, de manera breve, respetuosa, puntual y concreta he de decir lo que a lo largo de mis años de Tuno he comentado: si se ha abierto el mundo laboral, académico, profesional, religioso, familiar, personal y otros aspectos a la igualdad de género, la Tuna no tiene porque ser la excepción, aunque también debo decir que nosotros los varones tenemos una gran desventaja, las damas tienen una natural facilidad hacia la coquetería que bueno, nos llevan un paso de ventaja, sin embargo, retomando el punto, no tiene porque existir este tipo de obstáculos o limitantes absurdas que existían en el siglo XIII, o XV o XVI para que la mujer sea parte integrante de la Tuna, ya que, si bien los primeros orígenes marcan que los Tunos eran Estudiantes Universitarios varones, hoy en día, la mujer ha ganado espacios en todos los ámbitos de la vida es por ello que tienen derecho a la educación en todos los niveles, consecuencia directa de esto también tienen el derecho y el deber de hacer Tuna y hacerla bien.



(Museo Internacional del Estudiante PIEZA DE LA SEMANA - Nº 46 – Una Estudiantina femenina decimonónica)
 


En México existe el derecho al libre ejercicio de la profesión, a la libertad de asociación y en base a tales, podemos decir de manera contundente que la Tuna no esta exenta de estas libertades por lo tanto prácticamente cualquier persona puede hacer Tuna en este país, sin embargo la única regla o condición “sine qua non” para hacer Tuna es seguir la tradición al pie de la letra, conocerla y sobre todo respetarla, usar trajes típicos, instrumentos acústicos, y apegarse en la medida de lo posible al repertorio tradicional de Tunería, y para tal respecto quiero compartirles una reflexión extraída de un documento de la Tuna de Distrito de la Universidad Católica Boliviana que a la letra dice:

“A lo largo de la Historia, pocas son las instituciones que han mantenido tan fielmente sus costumbres y tradiciones como lo han hecho las Tunas de todo el mundo. El Espíritu Estudiantil se ha ido pasando de generación en generación, desde los primeros sopistas que habían de sobrevivir gracias a su astucia y habilidad, hasta la época actual, donde -pese a lo que pudiera imaginarse-, el sentimiento iniciático y enriquecedor de la Tuna en la Vida Universitaria está más vivo que nunca. Como es obvio, muchas de las tradiciones han mudado de forma, han 
desaparecido o se han creado al devenir del tiempo, pero todas ellas son fieles a unos ideales comunes.”

Cabe mencionar que las diferentes regiones de México poseen una gran diversidad cultural, y una de las manifestaciones de esta diversidad, sin duda alguna la podemos apreciar en lo musical, es por ello que no nos extrañe encontrar a una Tuna “norteña” tocando acompañada de una redova, o a una Chiapaneca, Oaxaqueña o Veracruzana haciéndose acompañar de una marimba, etcétera, es por ello que, la Tuna, en lo musical, permite ciertas libertades en cuanto a su regionalización, por ejemplo, además de los instrumentos tradicionales, podremos encontrar también dependiendo del grupo de que se trate y de donde sea originario, charango, cuatro venezolano, guitarrón, violín, banjo, vihuela, acordeón etcétera, es también aquí donde encontramos una de las más importantes riquezas de nuestra Tunería mexicana, donde podemos encontrar y adaptar las más diversas y variadas manifestaciones musicales regionales como el son Jarocho, el mariachi, la marimba sureña, los tríos y su tan conocida música romántica, el Son huasteco, para llevarlas con la Tuna a todos y cada uno de los rincones de nuestro México y más allá de sus fronteras.

Por otro lado, la Tunería, desde mediados de los años 60´s cuando se tiene documentada la aparición de las primeras Estudiantinas en México, además de todo lo mencionado anteriormente, ha tenido un sello característico, siempre sus integrantes se han conducido en un plano de camaradería, de hermandad, de amistad sin comparación haciendo a este movimiento no solo el de un grupo de personas virtuosas o no de la interpretación de un instrumento musical o del canto, sino una verdadera hermandad, una verdadera fraternidad de personas que se ayudan, se tienden la mano, se brindan su amistad más allá de los escenarios y las convivencias, diferenciando claramente a nuestro movimiento de la Tunería y, por ende, a nuestras agrupaciones musicales de cualquier otro género que agrupe conjuntos como orquestas, bandas, mariachis, tríos, etcétera, es importante mencionarlo porque igual que respeto a la tradición en si misma con lleva implícito el poderse denominar Tuna o Estudiantina indistintamente, también lo es el desenvolverse como camarada, hermano de los demás Tunos, que por definición sin más que eso, son aquellos y aquellas que pertenecen a un grupo estudiantil denominado “Tuna o Estudiantina”.

Es por todo lo anterior que, queridos hermanos Tunos de México ( y no hago distingo de Tunos y Tunas o tuniñas, ya que el diccionario no acuña este último término como valido o existente) que les invito a que, sean Universitarios, independientes, parroquiales, de algún grupo de profesionistas, de alguna colonia o barrio, o cualesquiera que sea su origen solo se ciernan a la tradición y la lleven al pie de la letra para que, en el paso del tiempo y del espacio nuestra asociación Tunas y Estudiantinas de la República Mexicana, A.C. sea reconocida como un conglomerado de grupos que respetan la tradición, los ritos, los orígenes, saben de donde vienen y a donde van, saben leer los signos de los tiempos y no solo se imponen comportamientos como modas pasajeras y que realmente pueden poner en riesgo esta bella tradición centenaria.

Y cierro mi participación dejando esta reflexión:

Encontré una frase que quiero compartir con ustedes y que siento que encierra el real espíritu de la Tuna en México, Chile, España así como de quien practica este bello arte: “Tuno no es aquel que viste un traje sino aquel que hace todo lo posible porque este arte sobreviva para siempre”

AUPA LA TUNA

JUAN CARLOS CARRERO DÍAZ

 

 

ESTUDIANTINA DE LA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE AGUASCALIENTES, HOY TUNA UNIVERSITARIA DE LA UNIVERSIDAD AUTÓNOMA DE AGUASCALIENTES

 

 

 



 
 
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